Según ha podido saber este periódico, Extremo ya ha comunicado al Ayuntamiento oscense su decisión, basada en motivos personales, ya que su familia reside en Burgos, plantilla a la que pertenecía hasta 2011. En mayo de ese año tomó posesión en Huesca y se convirtió en el jefe de Parque más joven de España, con tan solo 30 años; tras obtener el primer puesto de una oposición a la que se presentaron 5 candidatos.
Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, sacó la plaza en Burgos cuando tenía 24 años. De bombero raso pasó directamente a jefe, sin estrenar siquiera los galones de cabo o de sargento, puestos intermedios en la escala de un parque. Antes, lo intentó en Zaragoza.
Su trayectoria es destacable. A los 18 años comenzó a estudiar Obras Públicas en la Universidad de Burgos mientras trabajaba con su padre en una pequeña empresa de construcción. A los 22 decidió que quería ser bombero y a los 24 logró hacerse con un puesto en el Parque de Burgos.
Ejerciendo su nueva profesión terminó el último curso de la carrera y -consciente de que para ser jefe de Parque exigen una Ingeniería superior o ser arquitecto- decidió matricularse en Ingeniería de Caminos en la Universidad Alfonso X el Sabio, en Madrid.
En Huesca estaba al mando de 36 efectivos, solo en la capital, pero también tenía que controlar la provincia, puesto que no cuenta con bomberos de la Diputación.
El jefe de Bomberos de Palencia, Andrés Redondo Ramírez, se jubila mañana, sólo unos días después de que sus compañeros le rindiesen un sentido homenaje, por lo que el Ayuntamiento no va a dejar al Parque sin mando superior ni un sólo día.
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